A medida que entramos en el que suele ser nuestro tiempo más intenso del año, le ofrecemos nuestro apoyo y oramos con usted. Usted ha continuado la misión y ha hecho todo lo posible por encontrar formas creativas e ingeniosas de conectarse con la gente de su comunidad. ¡Se ha convertido en experto en medios y mago de la tecnología en nombre de servir a Jesús y su misión!

Trabajamos para apoyarlo en sus esfuerzos continuos para continuar mejorando. Por tanto, le pedimos que, enfocado en la misericordia, la renovación y el consuelo, discierna en oración los ministerios que su parroquia ofrece como servicio a la comunidad, ahora que entramos en Adviento y la temporada navideña. Sabemos que hay muchas cosas que considerar y, entre ellas, es primordial la mentalidad de nuestros feligreses y miembros de la comunidad. Muchos están destrozados y asustados, han perdido a seres queridos, sus trabajos, sus vidas han cambiado, y ahora incluso el consuelo familiar que encontraban en la iglesia, en misa, ha sido alterado. El acompañamiento de estas almas, que sufren y necesitan curación, requerirá paciencia y comprensión de nosotros, sus comunidades de fe.

Le pedimos que escuche sus necesidades y ofrezca estos recursos, y los suyos propios, según corresponda. Esté preparado para ofrecer formas de volver a la comunidad parroquial, y hágalo con un sentido de hospitalidad y bienvenida. Algunas áreas particulares que considerar son la actitud y acción del personal y los voluntarios, el sitio web y las comunicaciones de la parroquia, e incluso la experiencia del individuo cuando regresa a la parroquia. Ahora es un momento excelente para considerar qué ministerios deben comenzar, cuáles deben detenerse y cuáles deben continuar, ya que es posible que ahora veamos entre nosotros a personas que no han estado con nosotros durante algún tiempo. Le pedimos que seas paciente y compasivo. Le pedimos que sea renovador. Le pedimos que busque y ofrezca el consuelo de Jesús.