18 de junio de 2018
El Reverendísimo William E. Lori, Arzobispo de Baltimore, expresó su decepción y profunda preocupación por la separación de familias como resultado de la política de inmigración vigente en los Estados Unidos.
“No hay una justificación racional para que un gobierno civilizado separe a niños de sus padres como herramienta para aplicar la ley. Esta acción amenaza la estabilidad de las familias, impone traumas y sufrimiento excesivos en las personas involucradas, incluyendo niños inocentes, y se contrapone a la noción de compasión y justicia que son el fundamento de nuestra sociedad americana. Me uno a mis hermanos obispos y a tantas otras personas de buena voluntad en el llamado a nuestros líderes para que se detenga la presente práctica de separar a niños de sus madres y para que se busquen otras formas de salvaguardar la seguridad en nuestras fronteras.“
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